en Tejas y Ladrillos
Campanillas (Málaga), 1976-1977
de Pepe Martín
Miguel Michitorena
FeS-UGT · Madrid
Este libro escrito por Pepe Martín, conocido entre sus compañeros de trabajo como Pepito la Huerta, muestra uno de los múltiples episodios de la lucha que los trabajadores emprendimos en los setenta para derribar la dictadura franquista y conquistar los derechos laborales que ésta nos negaba.
Pepe, compañero de El Militante, a la vez que actual responsable de Izquierda Socialista (PSOE) de Málaga, fue colocado, junto con otros compañeros, a la cabeza de un movimiento que rebasó las estructuras sindicales de la dictadura y acabó conquistando, a través de la lucha y de la organización, una serie de mejoras para un sector como el de la fabricación de tejas y ladrillos que, en Málaga, estaba muy atomizado.
El libro comienza explicando la situación de la comarca de Campanillas en aquellos años, una situación similar a la de muchos pueblos que crecieron sin planificación urbanística, sin los servicios mínimos de alcantarillado, electrificación, etc. necesarios para vivir dignamente en cualquier barrio. Por eso los vecinos se organizan y a través de las asociaciones de vecinos luchan por mejorar sus barrios.
En las empresas de Campanillas, la mayoría del sector de tejas y ladrillos, las condiciones de trabajo son penosas. Los trabajadores ven que si quieren conseguir mejorar su salario, reducir la jornada de trabajo, eliminar los destajos..., tienen que romper con el Sindicato Vertical, elegir comisiones representativas en las diferentes empresas y exigir a los empresarios la negociación de un convenio colectivo. Es ilustrativo ver cómo responde la patronal, entre los que se encuentra el demócrata Juan Jiménez Aguilar, durante años dirigente de la CEOE. Los despidos de los trabajadores más combativos, de los que estaban organizados, en definitiva, de los dirigentes naturales en las empresas, estaban a la orden del día.
En el libro, Pepe nos muestra cómo se forma la Coordinadora Obrera en Campanillas y después de hacer un censo de las empresas de la provincia de Málaga, ven la necesidad de contactar con el resto de trabajadores para hacer una plataforma reivindicativa entre todos y así poder negociar con más fuerza frente a la patronal.
En el libro vemos cómo se planteaba esta plataforma a los trabajadores, explicando en los panfletos por qué era necesario luchar por una serie de puntos mínimos. Explica Pepe los enfrentamientos con la patronal en las negociaciones del convenio, la movilización de los trabajadores y sus familias cuando se recrudecía la lucha y su repercusión en los medios de comunicación.
Este modelo de negociación, basado en las asambleas de fábrica y de sector, se fue perdiendo después de los Pactos de la Moncloa y se transformó en un nuevo modelo basado en la negociación por arriba, sin contar en la práctica con los trabajadores a la hora de debatir las reivindicaciones y aprobar o rechazar los acuerdos con la patronal.
El libro explica los problemas que surgieron en las empresas del sector cuando los empresarios las abandonaron, ya que no obtenían los beneficios deseados. Los trabajadores tuvieron que formar cooperativas para poder llevar un jornal a casa. Pero en el mercado capitalista es muy difícil salir adelante en cooperativas pequeñas y por lo tanto esta experiencia fracasó.
La lectura de Rebelión Obrera en Tejas y Ladrillos no sólo es aconsejable para los que vivimos las movilizaciones obreras que hicieron posible la caída de la dictadura franquista, sino que es muy recomendable para las jóvenes generaciones de trabajadores, ya que muestra las tradiciones del movimiento obrero del Estado español, que una y otra vez salen a la luz como vemos en las últimas luchas de Puertollano, auxiliares de Ensidesa, limpiezas de Asturias, etc.