El día de hoy quedará marcado como un punto de inflexión en la lucha de clases en Venezuela. La clase obrera venezolana ha conseguido una histórica victoria, producto de su movilización y la extensión de la lucha, enlazando con las UBEs y comunidadesEl día de hoy quedará marcado como un punto de inflexión en la lucha de clases en Venezuela. La clase obrera venezolana ha conseguido una histórica victoria, producto de su movilización y la extensión de la lucha, enlazando con las UBEs y comunidades organizadas de Morón. La nacionalización de Venepal y su administración bajo cogestión obrera reivindica la capacidad que tenemos la clase obrera para hacer avanzar esta revolución en la única dirección que garantiza su victoria: completar la revolución avanzando hacia el socialismo. Como habíamos previsto los marxistas, esta victoria ha servido para reactivar las heroicas luchas de los trabajadores de otras empresas cerradas. Se abre una nueva etapa, donde la clase obrera jugará un papel principal.

La fuerza de la clase obrera

Desde principios de este conflicto, los camaradas de la Corriente Marxista Revolucionaria nos avocamos a apoyar a estos trabajadores, como ya lo habíamos hecho con los que habían tomado empresas cerradas durante el paro patronal de 2002. Aunque algunos dirigentes al principio no veían la factibilidad de lograr la nacionalización de la empresa y hablaban tan sólo de organizar una lucha de resistencia contra los empresarios, nosotros siempre defendimos que con la movilización de los trabajadores y las comunidades de Morón junto con los trabajadores de todo el estado Carabobo y del país, esta victoria era una meta que podíamos lograr los trabajadores. Y efectivamente lo hemos conseguido, porque esta victoria de los trabajadores de Venepal es una victoria de todos los trabajadores venezolanos.

Con los métodos de lucha correctos, con un programa y una visión clara de cómo enfrentar esta dura batalla, se ha reivindicado la enorme fuerza que tiene la clase obrera cuando está organizada y tiene clara sus metas. Defendiendo la posibilidad de implantar un Núcleo de Desarrollo Endógeno en las gigantescas instalaciones de esta empresa, lograron ganar el interés de toda la comunidad de Morón y sus adyacencias, que entendió que luchar por esta victoria significaba también un avance para todos los habitantes de esta zona, de los campesinos, de los jóvenes y de todos los trabajadores del sector.

Extendiendo la lucha

En las mejores tradiciones del movimiento obrero, a finales de septiembre del año pasado, cientos de trabajadores junto a representantes de las UBEs del sector se reunieron en Asamblea para debatir sobre cómo llevar adelante esta lucha. En un ambiente de gran solidaridad y combatividad, los trabajadores y los sectores populares manifestaron una vez más de modo inequívoco una inquebrantable voluntad de lucha. El camarada Edgar Peña, secretario general del sindicato de trabajadores de la industria del papel (SUTIP) y dirigente de los obreros de Venepal, hizo una clara invitación a la lucha a toda la comunidad presente: “Invitamos a las UBEs, como representantes de las comunidades, a que nos apoyen ya que nosotros también somos parte de la comunidad, los trabajadores de esta empresa somos de Morón, pero también de otras zonas de Carabobo así como de Yaracuy y Falcón. Si se cierra la empresa nos afecta a nosotros como trabajadores pero afecta también a toda la comunidad (…). Si perdemos los empleos de Venepal o seguimos sin percibir nuestros salarios no sólo sufrirán nuestras familias sufrirá toda la comarca. Venepal somos todos, es una empresa que debemos convertir en social, en un instrumento al servicio de toda la sociedad. No tenerla como un castillo sino abrirla, mezclarnos con la comunidad porque todos tenemos los mismos intereses”

De esta forma, los trabajadores lograron realizar movilizaciones en Morón donde participaron cientos de personas de la zona y no sólo trabajadores de Venepal. Para resistir esta larga batalla, fue importante la intensa campaña de solidaridad financiera que realizaron dirigentes de la UNT Carabobo, especialmente en las fábricas de Valencia. Pero como siempre insistimos los marxistas, una lucha contra los empresarios no es sólo de resistencia económica, pues las reservas de nuestra clase no se pueden comparar con las de la clase dominante, que contará con el apoyo de toda la oligarquía financiera. Por ello, los camaradas de la CMR iniciamos una intensa campaña de solidaridad no sólo a nivel nacional, con gran cantidad de volantes repartidos en todas las movilizaciones y artículos en nuestro periódico El Topo Obrero, sino utilizando la ya existente logística de la campaña de solidaridad internacional Manos Fuera de Venezuela, se dio a conocer esta lucha a nivel internacional, logrando una marejada de mensajes de solidaridad y aportes al fondo de lucha de casi todas partes del mundo.

Firmado el decreto: ¡Venepal de los trabajadores!

En la mañana de hoy miércoles 19 de Enero de 2005, en el Salón Ayacucho del Palacio de Miraflores, el Presidente Hugo Chávez firmó el decreto No. 3438 con el cual se oficializa la expropiación de Venepal y que será de ahora en adelante administrada en cogestión por el Estado y los trabajadores de esta empresa. Un buen reporte del acto de la firma del decreto la han publicado los camaradas de Aporrea.

Ya el pasado 13 de Enero, producto justamente de la movilización lograda por los trabajadores, se había aprobado en la Asamblea Nacional declarar a Venepal como un bien de utilidad pública e interés social, que ya de por sí era un importante paso adelante en esta lucha. Ya anteriormente, el camarada William Izarra se había manifestado en apoyo a la lucha de estos trabajadores y por la nacionalización bajo control obrero.

Reactivar las luchas de las fábricas tomadas

Como señala el compañero Adalberto Trejo de Aporrea en su reporte, “el Presidente Chávez subrayó, que esta medida forma parte del plan de desarrollo endógeno territorial que lleva a cabo el Gobierno nacional, para beneficio económico y social del pueblo. (...) destacó que la recuperación de empresas por parte del Estado está encaminada principalmente a cambiar las condición de explotación a que han sido sometidos los trabajadores por parte del modelo capitalista y la recuperación del tejido industrial nacional.”

Si bien se insistió durante el acto que éste era un caso excepcional y que no significaba una avanzada contra la propiedad privada de los medios de producción, el presidente insistió en que “empresa que esté cerrada, y abandonada, vamos por ellas. Por todas ellas. Es el rescate del tejido industrial”. Adicionalmente, indicó el presidente que “Nuestro modelo de desarrollo implica el cambio en el aparato productivo. La clase obrera debe estar unida, estudiosa y participativa. Invito a los líderes obreros a que sigan en ese camino.” Y es que justamente este histórico decreto no sólo significa una victoria para estos trabajadores de Venepal, sino que siginifica la reactivación de la lucha de cientos de trabajadores, como los de la Constructora Nacional de Válvulas, quienes de hecho ya han empezado a reactivar su lucha, convocando asambleas; Industrial de Perfumes - Cristin Carol; Textiles Fénix, CODIMA; entre otras. Además, está a las puertas el conflicto de la PARMALAT.

Los camaradas de la Corriente Marxista Revolucionaria celebramos esta victoria como nuestra, pues es una victoria de nuestra clase, una victoria del proletariado. Pero más aún celebramos las nuevas luchas que inevitablemente van a surgir o se van a reanimar de este conflicto. Como lo dijo hoy mismo el Presidente Chávez, “No hay que tenerle miedo a los trabajadores si son el alma de las empresas”.Y con una dirección clara, con un programa concreto y los métodos de lucha de la clase obrera, podremos hacer de este año 2005 el año del verdadero salto adelante en la revolución bolivariana, de una nueva etapa de “revolución dentro de la revolución” para completarla hacia el socialismo, hacia una economía nacionalizada y planificada democráticamente por los trabajadores.


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