Según nota de prensa difundida por el Comité de Solidaridad Obrera del Estado Anzoátegui el lunes 1 de agosto, los trabajadores de la empresa Super S, que llevan años denunciando las “irregularidades que observan en el proceso productivo de la empresa” por parte del empresario y “no habían conseguido una acción contundente por parte de las autoridades competentes” declararon que esperan que la Inspección ordenada recientemente por el Gobierno Bolivariano sirva para dar “a conocer públicamente el sabotaje de este empresario, que acapara cantidades de sacos de alimentos balanceados para animales y vende a precios especulativos a los consumidores”.
En la nota difundida, los trabajadores denuncian estas prácticas del empresario como “algunas de las fechorías que viene realizando desde hace mucho tiempo, sin nombrar su red de distribución, autoabastecimiento productivo de granjas que formar parte del grupo La Caridad, empresarios reconocidos en el sector”.
Los trabajadores, según explica la nota de prensa difundida: “están conscientes de la importancia que tiene la producción de esta empresa para la coyuntura política de la guerra económica que vive el país, por eso plantean colocarse a la disposición inmediata de elevar la producción. Exigen la reactivación de todos los turnos productivos que mantiene paralizado el patrono desde el mes de mayo, igualmente solicitan de manera urgente un ajuste de salario que permita garantizarle a los trabajadores sentirse en óptimas condiciones para laborar (cubrir su alimentación y la de sus familiares) ya que es grave la situación económica que padecen al igual que sus compañeros de Trabajo de Super S-Maracaibo, requieren con urgencia poder cubrir sus necesidades sin preocupación alguna, como lo establece la Ley Orgánica del Trabajo en los Artículos 96, 98 y la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela, Articulo 91.”
La intervención del Gobierno, que se produjo a través de la Gran Misión Abastecimiento Soberano Seguro (presentada recientemente por el Presidente Nicolás Maduro) y tuvo lugar el pasado 14 de Julio.
En el texto publicado por los trabajadores de Super S estos “consideran que el gobierno no puede seguir confiando en estos saboteadores”, en referencia a los empresarios. “Son innumerables las veces que han traicionado los acuerdos, solo recordemos que el 13 de noviembre del 2015, el vicepresidente Arreaza sostuvo reunión con este sector y llegaron acuerdos como fue el subsidio del cartón de huevos y al día siguiente este rubro desapareció del mercado y así golpear el proceso electoral del 6D, no descartamos que nuevamente se atrevan a realizar este tipo de hechos vandálicos; por eso hacemos el llamado a la organización y confiar en los obreros, para que de una vez por todas derrotemos a estos lacayos que seguramente culpan a los trabajadores de sus fechorías (subrayado en el texto difundido por los propios trabajadores)”
Por ello: “Proponen crear una comisión de control y seguimiento con voceros y voceras elegibles y revocables en cualquier momento por la asamblea de trabajadores, que sean rotativos, sin privilegio alguno por encima de los obreros y que rindan cuenta periódicamente, para fortalecer el desarrollo productivo de la empresa, conocer la estructura de costo, producción, distribución y que la relaciones laborales sobre los beneficios contractuales se ajusten según la ganancia del patrono. También esperan que los dirigentes sindicales de la CBST-Anzoategui los apoyen con estas propuestas, se aboquen a realizar una asamblea general de trabajadores y hagan publica esta petición”
Para cualquier apoyo y solidaridad a este colectivo de trabajadores pueden comunicarse por el siguiente correo electrónico: Esta dirección de correo electrónico está siendo protegida contra los robots de spam. Necesita tener JavaScript habilitado para poder verlo..
Desde la Izquierda Revolucionaria apoyamos a los trabajadores de Super S en sus justas reivindicaciones. Las propuestas que han presentado van en la única dirección posible para acabar con la corrupción y el desabastecimiento, y garantizar tanto la defensa de todos los puestos de trabajo como la recuperación de la producción en el país, el abastecimiento de la población y la soberanía alimentaria. Para defender la revolución y el legado de Chávez frente a la ofensiva del imperialismo y la derecha es imprescindible acabar con el poder económico, sabotaje y especulación de los empresarios y garantizar la participación de los trabajadores en la toma de todas las decisiones, la elegibilidad y revocabilidad de los cargos y la apertura de los libros de cuentas e inventarios a la inspección de la clase obrera y el pueblo.