Trabajadores Revolucionarios que están luchando contra la guerra económica de empresarios de las fábricas, Matadero de Clarines, Super S, Abreu de Lima, Sal Bahía, Grasaca, entre otras están siendo asediados y despedidos de manera irregular, se puede confirmar por las siguientes fuentes:

https://www.aporrea.org/trabajadores/n301618.html

https://www.aporrea.org/trabajadores/n299445.html

http://eltiempo.com.ve/locales/zonasur/protesta/trabajadores-de-matadero-en-clarines-paralizaron-labores/230474.

http://www.noticiascandela.informe25.com/2016/08/anzoategui-trabajadores-de-la-planta-de.html.

Seguir llamando y pactando con los empresarios permite a la sectores burocráticos flexibilizar los derechos laborales y atacar la estabilidad laboral, los acuerdos tras vestidores, golpeando a la clase obrera, es traición al legado del Comandante Chávez, destruye la moral revolucionaria y acaba con las posibilidades de construir el estado socialista que aspira el pueblo Chavista y los trabajadores.

Los trabajadores hacen un llamado urgente para que la Central Socialista Bolivariana de Trabajadores de Anzoátegui (CBST-Anz), se pronuncie rechazando esta agresión y organizando acciones revolucionarias junto al pueblo para acabar con la corrupción, y concretar la revolución dirigiendo a la clase obrera a la toma del poder político y económico.

Para derrotar la crisis profunda que atraviesa el proceso bolivariano en Venezuela, NO se puede seguir Imponiendo una Economía Capitalista. Lo inmediato es confiar en la clase obrera, organizando una economía verdaderamente socialista expropiando a los Banqueros, a los Terratenientes e Importantes Empresas, colocándolas bajo gestión y control directo de los trabajadores, No de burócratas elegidos a dedos, donde el método y la herramienta para acabar con la corrupción debe ser la conformación de los consejos de trabajadores con elegibilidad y revocabilidad inmediata por la Asamblea General de Trabajadores. Los voceros, delegados, directores o funcionarios de altos cargos de libre remoción (que actualmente son decididos por la direcciones del Partido, burócratas, sus parientes y allegados), los cuales deben rendir cuenta cada seis meses de su gestión ante la asamblea general de trabajadores, tener un salario igual al de un trabajador calificado y rotar periódicamente según lo decida la asamblea de trabajadores.