El lunes 8 de diciembre tuvo lugar una asamblea en la fábrica Vivex ocupada por sus trabajadores desde el 20 de noviembre. Con gran ánimo asistieron trabajadores de toda la zona industrial de Barcelona, de Mitsubishi, Macusa, así como directivos sindicales de Toyota de Cumaná , Oximetal y Ford de Carabobo para respaldar la lucha de los trabajadores. Se esperaba la presencia del viceministro del trabajo Abraham Musa.
El conflicto se inicio con motivo del impago de los 120 días de utilidades que corresponden a los trabajadores. Pese a que esta empresa cubre el 80% del mercado venezolano de vidrios para carro, pese a los enormes beneficios acumulados en los últimos años, pese a cumplir hasta el mes de septiembre el 100% de los pedidos de los proveedores, los patrones de la Vivex han obligado a 400 trabajadores y sus familias a pasar unas navidades sin recursos económico. "¡Todo el año trabajando, para que nos venga con otro engaño más ¡" era el grito común de indignación de los trabajadores de la planta.
En la fábrica los trabajadores esperaron durante todo el día al viceministro del trabajo Abraham Musa para que tuviera una declaración a favor de los trabajadores y de su lucha por la estatización de Vivex. Los trabajadores están hartos ya de engaños continuos del patrón mientras el se llena el bolsillo con el sudor y la salud de los trabajadores. El ambiente era de entusiasmo y expectación ante la llegada de un representante del gobierno bolivariano que pudiera dar solución al problema de los trabajadores.
Aproximadamente a las 5 de la tarde apareció el viceministro Musa con el coordinador del ministerio del trabajo en Anzoátegui. Ambos fueron recibidos con entusiasmo por los trabajadores que coreaban consignas a favor del presidente Chávez. Cerca de 300 trabajadores asistieron a la asamblea dentro de la fábrica tomada. Entre gritos a favor de Chávez y del control obrero entraron en la planta donde se realizó la asamblea.(Video)
Los trabajadores solicitan al viceministro del trabajo posicionarse a favor de la estatización.
El primero en tomar la palabra fue el viceministro. Habló de la necesidad de la unidad de la clase trabajadora; de que el objetivo fundamental de la revolución era la construcción del socialismo, que la clase trabajadora tenía que ponerse al frente de la revolución. Y que el ministerio del trabajo lo único que podía hacer era mediar para resolver el conflicto laboral que había en la empresa.
Algunos trabajadores en sus intervenciones le pidieron que se posicionara respecto a la propuesta del presidente Chávez realizada el 1 de diciembre de que empresas en quiebra o que desconocieran los derechos de los trabajadores deberían ser expropiadas por el gobierno nacional. El viceministro respondió que la expropiación era “una decisión política que dependía del presidente Chávez “y que él “no tenía competencia”. Ni una sola palabra a favor de la expropiación ni siquiera planteando la idea de que aunque no fuera de su competencia, él iba a ayudar de algún modo para que se nacionalizara la empresa. Nada de eso. Si no incluso peor aún, señaló que los trabajadores tenían que tener cuidado no fuera que “el control obrero se fuera a convertir en un instrumento de nuestros enemigos”¡¡, y que los trabajadores lo que tenían que hacer era esperar a que “la nueva ley del trabajo estuviera recogida la figura del control obrero” para implementarla!!.
El viceministro animó a los trabajadores a que una de sus principales tareas era estar ideológicamente preparados para el control obrero. El caso es que los trabajadores lo están aplicando ya en la práctica. Muchos funcionarios del gobierno, entre los que se encuentran muchos burócratas, últimamente han cambiado la forma en que plantean la idea falsa y reformista de carencia de conciencia de las masas. Ahora no hablan de falta de conciencia, no, si no de que hace falta más formación política para los trabajadores y el pueblo sepan cómo marchar al socialismo. La verdad es que la autentica formación que hace falta es para la dirigencia bolivariana, altos cargos del gobierno, ministros, gobernadores, alcaldes… ellos son los que tienen un bajo nivel de conciencia: cualquier trabajador, campesino o pobre del país tiene un nivel político más alto, un instinto político más certero que toda la burocracia junta cuya existencia es la principal amenaza para el triunfo de la revolución.
Varios trabajadores siguieron a la intervención del viceministro. El primero señaló que todos en la empresa eran dirigentes no tan sólo los directivos sindicales, y que no podían soportar más los maltratos del patrón. Que ellos estaban poniendo en práctica la línea del presidente Chávez de “empresa cerrada empresa tomada”. Otro obrero habló que: “¡Que respuesta le voy a dar a mi esposa e hija de 5 años esperando diciembre!”. ¡¡Esta conducta es de miserables¡. El mismo obrero también señaló que los trabajadores no podíamos esperar a la ley orgánica del trabajo para implementar el control obrero y que lo que había que hacer es marchar a Miraflores para la lucha de los trabajadores llegue a oídos del presidente Chávez. Ah esto siguió gritos de todos los trabajadores ¡Uh Ah Chávez no se va!.
¿Qué apoyo nos va a dar usted? Le espetó un trabajador. Otro señalo que los trabajadores sí pueden, que han estado laborando sin recibir real desde la toma y que lo único que necesitan para poner a producir es materia prima, “este es el corazón de las ensambladoras, nosotros tenemos el 80% de la producción de vidrio”. Otro obrero habló de que no querían en la fabrica conciliación de clases¡¡¡ a lo que siguió un grito unánime, ¡ Control obrero¡ ¡control obrero¡ “junto con su apoyo podemos seguir impulsando el socialismo que plantea el presidente de la república”. Denunciaron también que el gobierno tenía que parar la importación de vidrios desde la empresa Vitemco desde Colombia .¡ El pueblo arrecho reclama sus derechos¡¡. Otro trabajador señalo al ministro. ¡¡Sea usted el enlace en el presidente y los trabajadores¡¡
Una trabajadora de mediana edad se levantó y con indignación dijo: “en 8 años cuantas veces el ministerio del trabajo ha sancionado a Viso, ¡Ninguna¡”. “En la construcción del socialismo no se puede permitir estos atropellos a los trabajadores, los patronos están golpeando a los trabajadores. Llevamos 6 años de lucha en la empresa y contamos con ustedes para que nos ayuden”. Reclamó la trabajadora de Vivex.
Apoyo del resto del sector automotriz.
Félix Martínez directivo sindical de Mitsubishi mostró el respaldo de los trabajadores de Mitsubishi a la lucha de Vivex y señaló hay que construir un estado de los trabajadores frente al estado burgués, estamos llevando en la práctica no en teoría el control obrero de la fábrica. Continuó hablando “La derecha esta arremetiendo contra las misiones, vemos a Radonski en Miranda, si conciliamos ahora vamos a tener el mismo problema. Los empresarios no quieren mejorar la línea de producción, los únicos que podemos hacerlo somos nosotros los obreros que somos los únicos que podemos construir el socialismo”. “Queremos lo que paso en Sidor pero bajo control obrero, somos capaces de gestionar nuestro propio destino”. “¿Planificación de la economía social con los Mendoza?. ¿Si hay que expropiar las grandes empresas hay que expropiarlas?”. Esto levanto una ovación entre los trabajadores.
Argelis Vázquez directivo sindical de Toyota en Cúmana señaló que no se invierte en salud y hay muchos trabajadores con problemas de espalda y no lo hacen por cuestión de dinero. “Muchachos que no pasan de 30 años con problemas de hernias”. Los trabajadores somos la columna vertebral de un proceso socialista. “Vamos a tomar la empresa para que se respete a la clase obrera” Toyota Cumaná tiene ahora paralizada la fábrica con la escusa de la crisis y de la paralización de Vivex. Trajeron 1800 carros de fuera del país, ¿Así se implementa el desarrollo endógeno? “Esta es una estrategia para romper la unidad de los trabajadores”.
Juan Aguilar del Sindicato de Ford en Carabobo también mostró su solidaridad con los trabajadores de Vivex. Habló de que ellos también estuvieron al borde del conflicto hace unas semanas y que el conflicto de Vivex era el inicio de movilizaciones contundentes del sector automotriz contra la política de las multinacionales y la burguesía que quieren destruir la organización de los trabajadores y sabotear los derechos que ha dado la revolución. Apoyó la estatización de Vivex y propuso una campaña en todo el sector automotriz de apoyo económico a los trabajadores de Vivex.
Tras varias intervenciones y saludos, la asamblea que fue grabada para su emisión posterior por un equipo de Vive TV finalizó a horas de la noche.
El ministerio del trabajo debe implementar las iniciativas del Presidente Chávez.
El Presidente Chávez se manifestó claramente el 1 de diciembre por la nacionalización de las empresas en crisis o que irrespetan sus derechos a los trabajadores, sin embargo el viceministro del trabajo no parece muy claro con el lineamiento político del Presidente de la república. El viceministro Musa debe cambiar esa política de lavarse las manos en este asunto de la nacionalización; la revolución socialista no puede darse sobre la base de la conciliación de intereses entre patronos y obreros. El ministerio del trabajo debe servir para apoyar a los trabajadores en sus luchas, incluidas las que desbordan el marco reivindicativo y se plantean la lucha por el control de la producción. En el marco de la crisis del capitalismo y de la lucha por el socialismo es inevitable y natural que estas luchas se den. Sí, la clase obrera debe jugar su papel protagónico en la revolución, como dice el ministro Hernández, pero el mismo ministerio que él dirige debe alentar precisamente ese papel protagónico que pasa por que los trabajadores tengan el control de los medios de producción dentro de una economía nacionalizada planificada democráticamente, y no mirar para otro lado cuando los trabajadores toman una planta. Esa política, desafortunadamente, sólo beneficia a la burguesía y socaba la base de la revolución ya que con ella el gobierno nacional no da solución a los problemas de los trabajadores.
Sólo la extensión de la lucha al resto de la clase obrera, las comunidades y el PSUV puede garantizar la victoria para los trabajadores de Vivex.
Esto muestra una vez más que sólo con la movilización contundente de los trabajadores, las comunidades y la base del PSUV es la única que puede garantizar la victoria de la los trabajadores del Vivex y con ellos el del resto del sector automotriz. Frente al sabotaje burocrático de todos aquellos que desde los ministerios quieren frenar el avance de la revolución al socialismo, que sabotean las iniciativas del Presidente Chávez, que tratan de engañar al pueblo hablando del socialismo mientras benefician a la burguesía, sólo la movilización de los trabajadores , el pueblo , la base del PSUV puede cambiar este estado de cosas.
Los trabajadores del sector automotriz al mismo tiempo que se movilizan a favor de la enmienda constitucional que permitiría la postulación del presidente Chávez para un nuevo mandato, deben luchar por la nacionalización de Vivex y el control obrero de la producción a través de la movilización, extendiendo la lucha y unificándola romperemos el sabotaje burocrático y derrotaremos la ofensiva patronal, sentado la base para una ofensiva de los trabajadores que los pueda poner a nuestra clase al frente de la lucha por el socialismo en Venezuela.