Las y los educadores siguen luchando y se han convertido en un ejemplo para el resto de la clase trabajadora en Venezuela. Exigen un salario como establece la constitución y son un sector laboral muy importante para el desarrollo de la sociedad. Así lo consideró el fallecido presidente Hugo Chávez Frías. El mayor porcentaje son mujeres y madres, conscientes del deber que tienen con la enseñanza de los jóvenes.
El Militante: Acabamos de conmemorar el 8M, día internacional de la mujer trabajadora. ¿Cuál es la situación de las mujeres docentes?
Marina Chique: Podemos afirmar que hoy seguimos siendo un sector de la población bastante vulnerable. Este 8 de marzo, igual que aquel día de la historia en la que un grupo de mujeres perdieron su vida en la fábrica, haciendo una justa defensa de sus derechos laborales, las docentes también nos encontramos en condiciones adversas de bajos salarios, problemas de salud, de alimentación, trabajando en espacios en malas condiciones y en general enfrentándonos a la agresión del Gobierno que con su comportamiento nos ha demostrado que la educación no está entre sus prioridades, haciéndonos víctimas tanto a los docentes como a los estudiantes, ante la falta de atención prioritaria a un sector tan sensible como es la educación.
E.M: ¿Cómo crees que podría mejorar la situación de la mujer trabajadora docente?
M.Ch: Es necesario un cambio de sistema totalmente. La situación precaria en la que nos encontramos está directamente relacionada con la política económica y el tema del bajo salario. El Gobierno anuncia no poder cumplir a causa del bloqueo y las sanciones impuestas por los EEUU, que como hegemón mundial hace presión sobre nuestro país. Esta agresión, aunado a la falta de medidas internas realmente revolucionarias, ha impactado drásticamente en la vida de todos los trabajadores venezolanos y en especial de las mujeres.
E.M: ¿Qué opinión tienes de la reciente lucha docente?
M.Ch: Opino que ha sido, es y será necesaria ya que es imposible la vida de los trabajadores de la docencia a un salario mínimo de 5$ mensuales. Es necesaria porque las condiciones inadecuadas en las que actualmente se ejerce la profesión docente tienen que ser superadas y porque en trasfondo pudiera haber efecto intencional o por consecuencias de una privatización educativa, la cual debemos evitar. Es una lucha con conciencia de los trabajadores que hasta ahora no han permitido la manipulación de ningún partido político y que espera la rectificación por parte de la gestión de nuestro gobierno a quien exhortamos a priorizar la educación y la salud, a sanear la administración pública de los recursos con los que contamos en el contexto de un bloqueo, a evitar el despilfarro y la mala inversión y sobre todo a combatir la corrupción.
E.M: ¿Qué importancia crees que, a nivel internacional tiene el que se conmemore el día 8 de marzo?
M.Ch: Considero que a nivel internacional, en cualquier rincón del planeta, las mujeres tenemos muchos asuntos por resolver, inherentes a nuestros derechos como seres humanos y tenemos mucho que aportar, mucho que complementar, y más aún en estos tiempos tan convulsionados. Conmemorar internacionalmente el día de la mujer trabajadora tiene un impacto positivo en la creación de la conciencia de los pueblos en relación a la lucha por nuestros derechos y que seamos valoradas con nuestras potencialidades para la construcción de sociedades más igualitarias, justas e incluyentes.
E.M: Tú has sido elegida recientemente como delegada del sindicato SINAFUM ¿Cuál crees que van a ser los ejes de la lucha sindical?
M.Ch: Lamentablemente debo decir que SINAFUM se ha pronunciado por la desmovilización de los trabajadores de la educación y desestimando esta lucha, descalificando la convocatoria al señalar que no la hace ningún sector participante en la discusión del contrato colectivo, perdiendo la oportunidad de dar una dirección revolucionaria a estas movilizaciones y quedando como un sindicato patronal ante los agremiados. Sin embargo, han anunciado como ejes de lucha, el sostenimiento de los derechos humanos de los trabajadores.
E.M: ¿Qué debería mejorar en el sistema educativo venezolano? ¿Es suficiente su financiación y el personal?
M.Ch: Principalmente debe mejorar la inversión que el gobierno asigna al sector educativo. Según las informaciones de que disponemos los docentes, tengo entendido que para el presupuesto nacional del año en curso se destinó un 18% para la educación, porcentaje que no debe haber escapado de la distorsión económica en la que nos encontramos. Lo cual ha hecho crisis en todos los componentes del sistema, incluyendo al personal. Muchos profesionales han abandonado sus labores por migración, por los bajos salarios, por salud, lo que ha conllevado a que la calidad formativa de los estudiantes en estos últimos años no sea la mejor. Los diferentes niveles y subsistemas educativos deben dejar de ser tratados como estructuras organizativas del partido de gobierno y hacer mayores esfuerzos en elevar la calidad de lo que se enseña, de lo que se aprende, de los recursos que se destinan. Hay que luchar por más financiación pública para poder resolver todos los problemas de la educación, así como lo planteaba Chávez.